Amaya Arzuaga Cibeles 2011.

A ritmo de rock & roll, Amaya Arzuaga ha presentado una colección muy juvenil y mucho más satisfactoria que en otras ocasiones. Vestidos y faldas muy ponibles, pantalones de pinzas y pitillo y algún abrigo oversize, han sido las prendas principales.
El cuero y la lana han sido los tejidos estrella de esta muestra. El primero, presente en vestidos, faldas y ajustadísimos pantalones. Y el segundo, en faldas y vestidos. Y dos colores: el negro (tono dominante en los desfiles del sábado) y el beige.

Lo mejor de esta colección Otoño-Invierno 2011/2012 han sido los jerseys largos a modo de vestido.

Una colección dividida en dos partes, dos siluetas muy definidas, una muy pegada al cuerpo y otra de amplios volúmenes. Y la segunda parte con más variedad de color, con el verde esmeralda y el frambuesa como protagonistas.

Fiel a su estilo, la diseñadora burgalesa no ha podido resistirse a enseñarnos una de sus piezas habituales: faldas mini con amplios volúmenes. Preciosa es esta fucsia, ideal para lucir en cualquier fiesta.

Pero para mí, el vestido más elegante y sofisticado ha sido este diseño largo negro con escote en “V” por delante y por detrás, con un lado sin manga y en el otro una manga abullonada. Una propuesta muy femenina. Ideal para llevarlo con unos Manolos mientras te mueves a ritmo de rock & roll mientras te tomas una copa de Larios 12.

Como prenda estrella, Arzuaga se queda con este vestido “carcelario” muy ajustado y con un poco de cola, sin mangas, cuello cerrado y de rayas horizontales en tres combinaciones de colores: gris-fucsia, beige-naranja y verde-gris. También un fiel estilo de Miuccia Prada.